Yo Quijote

 

Alguna vez tuve agüeros como el Quijote.

Eran tiempos de una crónica locura.

Abrí los ojos justo antes de dormirme

y vi que la realidad es estricta y sólo una.

 

Y es que Sancho Panza ya lo dijo:

hay razones lógicas y materialismo.

No hay lugar aquí para lo ambiguo,

ni mucho menos para idealismos.

 

Yo fui un Quijote. Yo fui un Quijote.

 

De amores platónicos y añejas reglas

en esta vida ya no queda mucho.

Miro el mundo y sus actuales normas

y tampoco por vivir escalando yo lucho;

 

pues ya conozco los molinos de viento

y de mi vida la escena y parte fingida,

los castillos imaginarios, el encantamiento.

La verdad: yo prefiero una vida buena y tranquila.

 

Yo fui un quijote. Yo fui un Quijote.